Si algo siempre ha caracterizado a Interpol, es el ímpetu que tienen para emitir sensaciones con las que nos identifiquemos desde el primer momento. Tal vez en sus últimos dos lanzamientos esa teoria no puede ser comprobada en realidad, pero con Antics dejaron muy en claro que ellos habían venido a este mundo por una simple razón: transformarnos en nuestros únicos confidentes de las historias de pasión, desamor y aventuras con las que se va jugando con fuego, en un ensamble de canciones con los que sus sentimientos se fundían sin problemas con los de nuestros corazones.