Por Elizabeth Muñoz
A vísperas de la nueva entrega de premios Mercury Prize recorreremos un poco de su historia para entender por qué es uno de los más importantes dentro de la industria musical de Reino Unido, por lo que desmenuzaremos un poco su trayectoria.
El Mercury Prize dio su primera emisión en el año de 1992 con la intensión de presentar otra opción que fuera distinta a los Brit Awards y que estuviera abierto a géneros como pop, rock, folk, dance, jazz, blues, electrónica.
Dicha propuesta tendría como objetivo una sola cosa: postular al mejor álbum del año, nominando a bandas provenientes de Inglaterra e Irlanda con una cotizada lista de 10 u 11 aspirantes a dicho puesto.
El único requisito para ser seleccionado es tener nacionalidad inglesa o irlandesa para poder ingresar al listado. En algunos casos, para poder ser nominado la banda debe de contar con el 50 % de sus integrantes que pertenezcan a dichas nacionalidades.
Como parte del premio también es otorgada una jugosa cantidad de dinero, la cual desde 2014 tiene el valor de 20,000 euros, que es equivalente a más de medio millón de pesos, todo con el propósito de dar un incentivo que les ayude a continuar con su carrera musical.
Relevancia y Maldición
La importancia que este galardón representa va desde la promoción de la banda, ya que algunas pueden resultar un tanto desconocidas para el resto del mundo; hasta el aumento de ventas del disco ganador. Por ejemplo, las ventas de xx, disco debut de The xx y ganador del premio en el 2010 incrementaron más del 40 porciento después de su triunfo, o James Blake y su Overgrown en 2013 que llegó a subir las ventas hasta más de mil porciento.
Hasta aquí todo podría sonar perfecto, pero si eres amante de la música sabrás que corre un rumor alrededor de este premio, pues muchos aseguran que recibir este galardón condena la carrera del artista, ocasionando que sus próximos discos no logren el éxito de su placa ganadora, es decir, que después de ganar el Mercury Prize su fama se quedará estancada.
Algunos artistas se han mostrado temerosos por la nominación y no todos quiere ser “honrados” con dicho premio, tal es el caso de Gorillaz que en el 2001 renunció a su candidatura con su álbum debut, declarando mediante un video que no querían ser asociados con la entrega de premios, con una frase que le dio la vuelta a Inglaterra: “No gracias, ¿por qué no nominan a otro pobre títere?«, todo esto protagonizado Murdoc.
¿Qué pruebas tenemos para decir si Mercury Prize está maldito? La repuesta podría ser que ninguna, pero revisitemos algunos de los discos ganadores para que juzguen por su propia cuenta.
Como mencionamos anteriormente la primera celebración de dicho premio se festejó en 1992 que contó con las nominaciones de The Jesus and Mary Chain y su Honey’s Dead; Erasure y su álbum Chorus; U2 con Achtung Baby y Primal Scream y su tercer disco de estudio Screamadelica, por mencionar algunas, resultando éste último como el gran ganador.
Mientras Screamadelica llegó al número 8 de los charts de Inglaterra, su siguiente álbum Give Out But Don’t Give Up solo alcanzó el puesto número 22, quizás por el cambió de sonido que éste representó, el cual contaba con tintes blues a diferencia de la psicodélica que habían mostrado antes, pero aún así viéndolo desde un punto de vista de mercadotecnia no es un rotundo fracaso.
Sus siguientes discos Vanishing Point (1997) y XTRMNTR (2000) los llevaron también por caminos diferentes y siguen siendo álbumes importantes dentro de su trayectoria, lo cual nos hace pensar que de haber una maldición, la carrera de Primal Scream hubiera terminado hace muchos años atrás.
Otro gran ejemplo es PJ Harvey y Arctic Monkeys. La primera, además de ser la más nominada, es la única artista que ha ganado dos veces el Mercury Prize: en 2001 con Stories from the City, Stories from the Sea y 2011 con Let England Shake, por lo que si la maldición es correcta simplemente no llegó a tocar el talento de Harvey. Por su parte Artic Monkeys ganó en el 2006 con su álbum debut Whatever People Say I Am, That’s What I’m Not, y hasta donde todos sabemos no han hecho más que ganar más fama a través de los años; tanto que AM fue considerado como uno de los mejores discos de 2013.
La realidad es que desde un punto de vista publicitario el Mercury Prize y el éxito de los representantes del mejor disco del año coincide con su auge comercial, tan simple como eso.
Controversia
Dejando atrás el mito de la maldición, hay otros factores que han molestado a fans alrededor del mundo y es que pesé a que el premio esta abierto a toda clase de géneros la realidad es que, dentro de su listado, en su mayoría cuenta con los mismos géneros: rock, indie, electrónica y pop encasillándose en el mainstream.
Algunos fans se han dirigido a uno de los jurados, Simon Frith, para convencerlo de considerar el metal dentro de sus elegidos, con lo que proponen la idea que este premio va en contra de algunos géneros como es el heavy metal.
Lo cierto es que el metal no necesita que lo incluyan en ningún listado pues su música siempre ha hablado por sí sola y que a representantes de dicho género los tiene sin cuidado, pero resulta frustrante no contar con una opción que de verdad se dedique a buscar lo mejor dentro de la música.
Otra de las situaciones que también han dejado una gran incógnita es que nadie sabe cuales es el criterio en el que basan su selección y por supuesto al ganador. Debido a que las nominaciones si cuentan con cierta diversidad de género es difícil saber qué camino toma el jurado para elegir al ganador.
Es común que el Mercury Prize seleccione a una banda que tal vez no es el contendiente favorito, lo cuál deja aún más en duda su selección. Lo único que se tiene un poco claro es que el jurado se conforma de periodistas musicales, productores, representantes, organizadores de la industria musical dentro de Inglaterra e Irlanda. Pero fuera de este dato se desconoce la parte con la que se juzgan a las bandas.
Sin embargo, este año el Mercury Prize sigue de pie y sigue siendo un buen punto de partida para conocer lo que está pasando en Inglaterra. Las propuestas del 2015 van de Jamie xx, Florence and The Machine y Aphex Twin, así que vayan preparando las apuestas.
¡Ah! Y por cierto… otra de las injusticias del premio, es que en 2013 ignoraron el m b v de My Bloody Valentine por haber sido editado de forma… uhm, independiente.