Durante los años 80 surgió una oleada de nuevos géneros que permitieron el nacimiento de bandas que hasta la fecha son consideradas como legendarias, aquellas que su sonido trascendió a un punto en el que, sin imaginarlo, se convertirían en la fuente de inspiración de las próximas generaciones; aquellas a las que el tiempo toca con el simple propósito de mejorar su sonido.
Una de ellas llegó en 1987 con Black Francis, Kim Deal, David Lovering y Joey Santiago quienes se presentarían así mismos como Pixies, al entregar Come On Pilgrim, un álbum que marcaría el nacimiento de una de las bandas más importantes, pero que no recibiría la atención que merecía. Seis meses después del lanzamiento de dicho material llegaría Surfer Rosa, producción que hoy en día es uno de los más aclamados de la banda.
En efecto Surfer Rosa, es y seguirá siendo considerado como uno de los mejores discos de la historia, sin embargo, el tiempo fue el que demostró su verdadero valor, como pasa muchas veces con absolutamente todo, debido a que durante esos años el sonido de Pixies no encajaba dentro de la escena a la que la industria le prestaba más atención.
Con el tiempo la aceptación de Surfer Rosa fue creciendo y si ahora echamos un vistazo al pasado podemos observar todo lo que ha creado desde su concepción, pero sobretodo podemos entender que logró conectar el sonido de los 80 con lo que nos esperaría en los 90 con la llegada del grunge, debido a que tendría un impacto mayo en bandas como Nirvana hasta Smashing Pumpkins. Por esta razón es por la que debemos considerar a este disco como una pieza imprescindible para entender la evolución y los cambios que se dieron con las siguientes generaciones.
Mucho ha cambiado desde el lanzamiento de dicho material, pero su esencia se mantiene intacta. La crudeza y emotividad con la que Francis y Deal construyeron este material se conservará durante mucho tiempo y esperamos que siga alimentando a muchas más generaciones y que sirva como recordatorio de cómo el pasado siempre ayuda a construir un mejor presente.
«Bone Machine»
«Something Against You»
«Gigantic»
«Cactus»
«Where Is My Mind?»