Fotos: Liliana Estrada, César Vicuña, Lulú Urdapillet y JJC
Por Ernesto Olvera
Cuando un festival está repleto de nombres atractivos, es normal que al momento de organizar los horarios nos encontremos con un panorama no tan cómodo y flexible donde podamos ver a buena distancia todo lo que nos emocionó con el anuncio inicial.
Pasa en México y pasa en cada festival existente y por haber alrededor del mundo, así que cuando Corona Capital reveló que el segundo día de actividades tendría como headliners a Arctic Monkeys, Paramore, Liam Gallagher y Jamie xx, era inevitable que fueran a presentarse conflictos desde muy temprano.
Y así fue, desde que abrieron las puertas corrimos a contemplar un poco del estelar krautrock de BEAK> en su regreso a la Ciudad de México luego de haberse presentado en espacios durados por NRMAL e Hipnosis.






Brotando de esos mismos espacios, el synth-pop de Lorely Rodriguez y su proyecto Empress Of nos recibió en el Tent para hacernos parte de una entrañable sesión de baile que, sin importar que el lugar todavía no estuviera realmente lleno, se desenvolvió a la perfección sobre el escenario para dejar encantados a cada uno de los asistentes.
En estas primeras horas todo parecía muy tranquilo y flexible, hasta que se fueron dando empalmes importantes donde: o sacrificabas una banda, u optabas por ver 20 minutos de cada una.





Probablemente esa es una de las dinámicas que no a todo el mundo le gusta sobre los festivales (además de los altos costos en comida y bebida… y el boleto), pero son acciones que se deben tomar cuando ya te encuentras dentro del lugar para sacarle provecho a la inversión, pues tampoco es cómo que hayan decidido gastar más de 3 mil pesos por quedarse parados en un solo lugar.
Es así que explorando a través de cada escenario llegamos al esperado debut de Black Midi en nuestro país, quienes inicialmente tenían pensado presentarse en la CDMX poco antes de la pandemia, pero naturalmente todo se vino abajo a raíz del confinamiento.
¿La espera valió la pena? ¡POR SUPUESTO QUE SI! La banda maneja una destreza musical donde en ocasiones generaban una impresionante catarsis ante todo aquel que estaba frente a ellos, incluidos algunos fans de Paramore que llegaron al escenario Vans desde temprano para darse un buen sacón de onda.






Por otro lado, el escenario principal manejó un combo de ensueño para todo aquel que experimentó su adolescencia durante el auge del “indie rock” de los dosmiles, pues de forma inicial apareció el esperado regreso de Foals con su más reciente álbum, siendo el torbellino de energía que necesitaba la audiencia para ir despertando poco a poco.
Más allá de decir que se respiraba una apatía muy extraña dentro de los asistentes o que fue una reacción provocada por la edad (que… tampoco es mentira), la realidad es que esta edición del Corona Capital también fue donde vimos más celulares levantados durante cada presentación del festival, entendiendo por un momento los manifiestos recientes de bandas como Placebo donde piden que no se la pasen viendo el concierto desde el celular.
El tema de los celulares en un concierto no se centra en la idea de prohibirlos o impedir que graben vídeos, pero hay un punto donde resulta un tanto cansado cuando deciden grabar todo el concierto sin considerar a las personas que se encuentran detrás. Tomen fotos, graben un par de vídeos para sus Reels o TikTok, y disfruten el resto de la experiencia porque: también se vale aplaudir, bailar, saltar e interactuar con músicos que bajan del escenario como Yannis de Foals.






El combo del escenario principal siguió su curso natural con la aparición de Yeah Yeah Yeahs, quienes estuvieron a casi nada de cancelar su presentación en el festival luego de que Nick Zinner estuviera enfermo de neumonía.
Afortunadamente se pudo recuperar de forma exitosa, por lo que Karen O aprovechó para dedicarle “Maps” y así pedirle a la audiencia que le gritaran “I love you Nick”, siendo uno de los momentos más emocionales que se vivieron durante el anochecer.
Aunque el trío lo estaba haciendo impecablemente sobre el escenario y más después de los 9 años que pasaron desde su última visita a la CDMX, la apatía que mencionamos al inicio seguía flotando en varios espacios donde parecía que lo único que importaba era la presencia de Alex Turner y compañía, solo que aún faltaban un par de horas para que eso sucediera.
Por otro lado, Yeah Yeah Yeahs ofreció una de las presentaciones más elegantes y energéticas de todo el festival, así que vayan apartando un par de billetes porque seguramente tendremos un concierto de ellos solitos en 2023.








Ya entrados en la noche fue momento de comenzar a correr de lado a lado o simplemente hacer sacrificios en cuanto a los horarios, pues llegó el empalme de Liam Gallagher con Paramore que, de forma inicial, pareciera que realmente no comparten una audiencia como tal, pero sí hay personas que tuvieron que partirse en dos para disfrutar de la retrospectiva artística de Gallagher con canciones de su repertorio como solista y los esperados clásicos de Oasis.
Sí, quizá en el pasado ya los habíamos escuchado con Noel Gallagher, pero la realidad es que el acto de Liam era uno de los más esperados en nuestro país desde hace muchos años, siendo el acercamiento más grande que podremos tener al soñado regreso de Oasis.
Sobra decir que su presentación fue coreada a más no poder cuando sonó “Wonderwall”, “Live Forever” y “Stand By Me”, mientras Liam se mostraba con su característico porte frente al micrófono e interactuando puntualmente con sus fans.





Por su parte, Paramore hizo absolutamente todo lo que se esperaba de ellos al mando de Hayley Williams, quien en múltiples ocasiones intentaba hablar en español diciendo que realmente se preparó antes de presentarse en el festival.
Además de interpretar el primer sencillo de su nuevo álbum, también sonaron clásicos que fueron desde “That’s What You Get” hasta “Decode”, su aportación dentro del universo de Twilight, siendo uno de los instantes más brillantes de todo su paso por el Corona Capital junto con «Misery Business» en compañía de unos fans sobre el escenario y «Hard Times» con un poquito de Blondie.
En caso de que hayan tenido que dividirse y tomar decisiones donde no pudieron verlos de principio a fin, les recomendamos que se mantengan atentos de la gira que irán expandiendo durante todo el próximo año, ya que seguramente los tendremos de regreso.









El momento estelar de la noche finalmente llegó con «It’s Not Usual» de Tom Jones, donde la gente poco a poco iba abarrotando el escenario principal para contemplar el regreso de los Arctic Monkeys; entre memes impresos de artimonki y una interesante mezcla de personas que conocieron a la banda en momentos muy diferentes de su carrera, ocuparon el escenario con “Sculptures of Anything Goes” para seguirse sin pausas con el clásico “Brainstorm”.
Verán, Arctic Monkeys es una gran banda, de eso no hay ninguna duda, pero muchos siguen esperando que sigan tocando o manejando la misma velocidad de su etapa adolescente, cuando claramente están enfocándose en otro tipo de cosas para inyectarle una mayor madurez a su sonido.
¿Es algo que a todos les gusta? No, pero es algo que tarde o temprano deberán aceptar, sobre todo cuando a lo largo de sus conciertos interpretan versiones renovadas de “505” y “Four Out Of Five” para adaptarlas con la esencia de The Car.
Sin embargo, su potencia natural salió a relucir cuando tocaron «Teddy Picker», «I Bet You Look Good On The Dancefloor», «Pretty Visitors» y el indiscutible himno «Do Me A Favour», convirtiéndose en el bloque perfecto para los fans más aguerridos de Arctic Monkeys, quienes se despidieron con el outro extendido de “Body Paint”.









Cuando se anunció la inclusión de Jamie xx en la próxima edición de Ceremonia, fue evidente que una gran mayoría de personas decidió omitirlo en su itinerario del Corona Capital y darle toda su atención a los Arctic Monkeys, algo que francamente es muy muy normal.
Sin embargo, aquellos que optaron por bailar hasta el cierre del festival se dieron cita en el Tent para dejarse absorber por las notables habilidades que tiene el productor británico al momento de mezclar tanto canciones de su propia autoría, las piezas que sampleó en In Colours y clásicos como “Vamos A La Playa”.
Honestamente, si no lo vieron en acción, desde este preciso momento les recomendamos que no se lo pierdan el próximo año, pues es una experiencia de vida donde les será inevitable mover sus extremidades al ritmo de “Gosh”.
Esto fue tan solo un poco de todo lo que se vivió durante el segundo día del Corona Capital, pues claramente cada uno de ustedes tuvo una experiencia única y diferente en cada escenario, aún con la amenazadora lluvia que se hizo presente en la noche y que por fortuna no nos regresó a lo que experimentamos en el 2014.




