La música industrial fue tomando varias formas desde su invención con un estilo mucho más apegado a la experimentación sonora y lo avant-garde con actos como Throbbing Gristle, para luego ir mutando con vertientes que incorporaron un poco de synth-pop y una tendencia electrónica que dio pie al nacimiento del EBM.
Probablemente, una de las bandas que se enfocó en transformar por completo lo que se conocía como industrial, en aquel entonces, fue Ministry al tomar todo lo podrido y confrontador del género para mezclarlo con la densidad del metal, haciendo que su álbum WIth Sympathy no tuviera absolutamente nada que ver con lo que hicieron un disco después (y con nada de lo que sucedía en los 80).
A partir de aquí, fue un poco más común encontrar proyectos que establecieron ese enfoque demoledor del industrial como Nine Inch Nails que, luego de publicar su álbum debut, se convirtieron en un referente del género.
Sabemos que para hablar del género y sus vertientes nos puede tomar una eternidad, o al menos una editorial más especializada para desmenuzar todo lo que se ha producido desde los 70, pero en esta ocasión estamos haciendo un breve recuento para presentarles a uno de los proyectos más emocionantes que hemos escuchado en la recta inicial del 2024: Purest Form, directo desde Los Ángeles.
“Se trata del miedo a la inteligencia artificial y las posibilidades que podría tener de separarnos aún más de nosotros mismos y de los demás en la sociedad. Le tengo miedo a la IA desde hace años. Existe una idea distópica de que tu yo auténtico podría ser reemplazado por algo artificial. La tecnología podría alejarnos de nuestro verdadero yo. Esa es la raíz de la música industrial para mí.”
Esas son las palabras de Story Beeson, la vocalista de Purest Form, sobre la narrativa que va implícita en el primer sencillo de la banda llamado “Broke”, donde desde el inicio nos hacen parte de un rasposo torbellino industrial que carcome la piel y sin duda nos hizo sentir lo mismo que pasó cuando Al Jourgensen nos presentó su distintivo sello vocal en la era densa de Ministry y el porte de Trent Reznor en el Pretty Hate Machine.
Madi Woodward y Riley Joyner acompañan a Beeson en esta abrasiva aventura, luego de que todos ellos se hicieron de un extenso historial tocando en bandas que van del punk al metal, tal es el caso de Roman Candles, Pocketknife, Choking On Ash y Vacant Future, así que esta exploración dominada por el industrial resulta demasiado refrescante luego de haber escuchado actos como Youth Code durante la década pasada, o más recientemente el magnetismo de Puerta Negra.
El excelente EP debut de Purest Form ya se encuentra disponible en Bandcamp, solo son tres canciones pero están increíbles. No les quitará más de 10 minutos: