Skip to content

COBERTURA

Reseña: ‘The Magic Whip’ de Blur

bd67996aThe Magic Whip
Blur
Parlophone
90%

Por José Carlos Martínez

Después de dieciséis años sin grabar una nueva producción, los fanáticos de la banda británica saltaron de emoción cuando meses atrás anunciaron un nuevo material llamado The Magic Whip, y aunque parecía casi imposible que sucediera porque sólo aparecían esporádicamente en algunos festivales con el siempre usado pretexto de “reunión de la banda”, fue en un restaurante chino donde por sorpresa decidieron mostrarnos a todos que estaban listos para lanzar un nuevo álbum.

Fue así como Damon Albarn decidió poner en pausa temporalmente su exitosa carrera en solitario para sacudir su cabeza y volver a complacer al público siempre fiel de Blur. Pero no sólo Damon dejó lo que estaba haciendo por un tiempo, también el baterista Dave Rowntree pausó su carrera como abogado y el bajista Alex James detuvo su fabricación de queso. Los tres comenzaron a trabajar en este nuevo material, pero al parecer no se concretaba nada y decidieron regresar a sus antiguos puestos, hasta que un año y medio después, Graham Coxon y el productor Sthephen Street, lograron sacar las pistas para darles forma y consiguieron convencer a Albarn para que colocara unas cuantas letras al sonido y todo quedó listo, el décimo tercer álbum de la banda estaba totalmente cocido y listo para ver la luz.

En The Magic Whip, vamos a poder notar que la voz de Damon ha envejecido de maravilla con esa elegante melancolía que siempre lo identifica. Además se nota que su trabajo en solitario ha provocado que perfeccione sin complicaciones cada una de sus técnicas. Este no es el mejor álbum de Blur, pero con tantos años en la industria lograron lo que cualquier banda de edad adulta necesita: frescura y espontaneidad.

«Go Out», tiene un rebote de confianza oscura, es una pista caprichosa, espeluznante, áspera y que con el sonido de las guitarras acelera los latidos durante toda la canción. “New World Towers”, por ejemplo, es un track vago, envuelto parcialmente en la electrónica e influenciado por el trabajo en solitario de Damon.

“Thought I Was A Spaceman”, es una especie de pieza droneque se transforma en sintetizadores espumosos con pequeños tintes de jazz. Sin duda todo esto es un territorio nuevo para la banda, como una reivindicación en sí misma. The Magic Whip, es un disco intrigante, lleno de ideas locas, sueños extraños y una nueva atmósfera que simplemente funciona.

Hay mucho por conocer de Blur en The Magic Whip, pero podríamos seguir preguntándonos ¿qué es todo esto?, o simplemente podemos disfrutar de este nuevo álbum que es verdaderamente bueno y que no suena como el final de una banda, sino como el renacimiento de algo que ya era grandioso y que quiere mejorar rotundamente.

Relacionados

Volver arriba