Discwoman nació en Nueva York con un propósito: el de proveer una plataforma para destacar a la escena de Djs y aristas femeninas. Debido al éxito que esta propuesta enfrentó, las fundadoras decidieron llevar el evento más allá de los límites estadounidenses, por lo que tuvimos la oportunidad de tenerlas en nuestro país para ser testigos del poder electrónico que estas mujeres proyectan.
Teniendo como sede el Salón Paraiso, la fiesta iba tomando forma a medida que la noche transcurría, la cual tuvo como principales propuestas nombres como Demian Licht, Emma Olson mejor conocida como Umfang, quien además es fundadora de Discwoman, Black Madonna y Volox.
Conforme el Salón Paraiso iba recibiendo a los asistentes, Demian Licht llenaba de intensos beats cada rincón del recinto logrando poner en transe a cada individuo que sin notarlo se alistaba para recibir a la guapa Emma Olson, que como buena profesional ligó a la perfección los sonidos de Licht.
Umfang nos sumergió en una montaña rusa sónica que por momentos te llevaba suavemente al punto más alto para dejarte caer en un vértigo dance que te inducía a bailar sin parar. Luego de un DJ set bastante diverso una de las más esperadas de la noche llegaba para apoderarse de la consola, así es Black Madonna se hacía presente para recorrer cada parte del cuerpo con cada transición.
Con una gran conexión con los asistentes, Black Madonna no paró de bailar y sacudirse al ritmo de su música dejando en claro que la fiesta no era exclusiva de los asistentes. Su alegría y precisión contagiaron al público que quería una fiesta de viernes eterna y sin descanso.









