Reseña: www.rockereando.com.mx
Fotos: @jemimo
Querétaro poco a poco se va posicionando como una buena plaza para promotores, bandas nacionales e internacionales. Hace unos años el Indio Emergente tocó esta ciudad y de ahí en adelante no había existido un evento que moviera la ciudad del modo que lo hizo Korn el sábado 23 de abril. Desde las 7 de la noche la gente comenzó a llegar a la Plaza de Toros Sta Maria. Barbas, playeras negras, chamarras de cuero y un sentimiento de excitación se apoderó de los queretanos quienes iban a dejar toda su energía entre gritos, saltos y uno que otro mosh pit.
Arcadia Libre comenzaba la noche alrededor de las 20 horas. Desde primer acorde la gente se entregó a la música quienes por cuarenta minutos calentaron motores para dar paso a «Tanus»; a pesar de tener problemas técnicos con el audio (se desconectó la consola), dieron todo en su presentación. El gran momento se dio cuando Tavo de Resorte subió al escenario para una versión más pesada de «Aquí no es donde».
Cerca de las 10:30 de la noche y con los primeros acordes de «Blind», rola con la que acostumbran abrir sus conciertos; Korn subió al escenario. ¡Querétaro se volvió loco!. Brincos, cerveza, empujones, agüita amarilla, euforia y una sed de rock, fueron los ingredientes principales para una noche que pasará a la historia como “la noche de Korn en Querétaro”.
Los momentos inolvidables se dieron cuando la banda liderada por Jonathan Davis tocó «One» de Metallica, pidieron silencio a toda la plaza para entonar «Twist» y ya casi al final «Another Brick In The Wall» voló la cabeza de los ahí presentes. Además de las rolas que todos esperábamos como «Somebody», «Falling Away From Me» y cerrando con «Freak on a Leash».