Por Milton Barboza
Hace apenas unas horas, la Academia Sueca anunció que este 2016 el cantautor Duluth, Minnesota de 75 años será galardonado con el Noble de Literatura, gracias a la creación de “nuevas expresiones poéticas dentro de la tradición de la canción estadounidense”.
Y no faltaron los buenos y malos comentarios, estos últimos a cargo de intelectuales que desestiman que haya sentido entregar este premio a alguien que se dedica en mayor medida a la música.
Pero se olvidan de algo importante, Dylan ha trabajado principalmente sobre la letra y nos atrevemos a decir, más que la música, ya que siempre hay una mayor estructura en esa lírica, esa poesía que eleva sentimientos, como lo hacen los grandes escritores, no sólo hablando de amor o desamor, sino también expresando la protesta social que le tocó vivir a él y su generación en los años sesenta.
No por nada ha sido covereado en infinidad de ocasiones por otros grandes músicos, también es influencia de letristas igual de reconocidos en todo el mundo; en pocas palabras, este reconocimiento es un poquito de lo mucho que le ha entregado a la música, a la literatura y a la cultura popular internacional.
“If you’re travelin’ in the north country fair
Where the winds hit heavy on the borderline
Remember me to one who lives there
Oh she once was a true love of mine
See for me if her hair’s hanging down
It curls and falls all down her breast
See for me that her hair’s hanging down
That’s the way I remember her best
If you go when the snowflakes falls
When the rivers freeze and summer ends
Please see for me if she’s wearing a coat so warm
To keep her from the howlin’ winds”
-Extracto de “Girl From The North Country” de Bob Dylan.