Es un hecho que la pandemia sirvió para analizar y replantearnos muchas cosas, pero antes de llegar a ese punto fue inevitable no caer en un torbellino de emociones que iban de la incertidumbre al miedo y la desesperación, pues realmente lo que estaba sucediendo durante el primer semestre de 2020 fue irreal.
Todas esas emociones y la evolución del confinamiento también contribuyeron a que distintos artistas fortalecieran su estilo de composición que, aunque no podían estar de gira, aprovecharon el encierro para componer canciones que poco a poco están viendo la luz del día.
En el caso de Oscar Tufic, el productor optó por refugiarse en el ir y venir de las emociones que experimentó durante el confinamiento, dando como resultado un álbum plagado de contrastes donde su sonido no se estanca en un solo rincón.
En sus propias palabras: “Me gustó experimentar con diferentes músicos que me ayudaron con arreglos increíbles. Este es un disco donde cada canción suena diferente porque cada canción la hice en diferentes etapas de la cuarentena. Podrían sonar muy diferentes entre sí, pero es la idea, la cuarentena fue una locura”
Sashimi de Labios es el nombre de esta producción compuesta de diez canciones donde Tufic recorre distintos estilos como el tradicional indie rock y el synth-pop, siendo un refrescante ejercicio retrospectivo para liberarnos de la frustración que experimentamos en los últimos dos años.






