Fotos: Dayan Álvarez
Por: Felipe Corrales
Quizá muchos de los asistentes al concierto de Keane el día de ayer no pudieron ir al primer show que ofreció la banda en México en el ya lejano 2004; uno que otro tal vez si, la idea es que los conciertos por el aniversario de un álbum siempre traen consigo una magia especial.
La gira del Hopes And Fears empezó en CDMX con un escenario sencillo pero que hacía resaltar el juego de luces y los visuales que se proyectaban por detrás, en el tema musical fue viajar a lo que ha mostrado Keane desde hace 20 años; canciones con un espíritu emocional altísimo.
Es inevitable no sentir el corazón acelerarse en canciones como ‘Bend And Break’ o ‘We Might as Well Be Strangers’. Tom Chaplin por su parte mantiene un tono de voz perfecto en dónde la nostalgia de haber escuchado estos temas años atrás resuena en toda la alma y te hace reflexionar que entre lo bueno y lo malo de la vida, la música siempre ha estado ahí.
Al no tocar de corrido su primer álbum Keane aprovecha esto para ir intercalando canciones de otros discos para así ir viajando entre épocas del grupo. Entre ellas canciones como ‘Silenced by The Night’, ‘The Way I Feel’, ‘Nothing In My Way’, ‘Crystal Ball’ o ‘ Is It Any Wonder’.
Volviendo al álbum qué festejamos, Keane dejó que los lágrimas y los recuerdos comenzarán a resonar en canciones como ‘ Your Eyes Open’, ‘This Is The Last Time’, ‘Bedshaped’, ‘Somewhere Only We Know’, ‘Everybody’s Changing’, ‘Untitled 1’ y ‘She Has No Time’.
Los shows de aniversario siempre tratan de evocar recuerdos, emociones y momentos especiales asociados con esas canciones para recordar, en memorias, todo lo que Keane ha dejado en sus fans después de dos décadas.
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