Por Kevin Zammit
Quince años son los que cumplen unos de los festivales más importantes del mundo, y uno de los acontecimientos referentes en el panorama musical, Primavera Sound, en Barcelona, España. Y esta vez pudimos asistir para conmemorar uno de los eventos musicales que marca una trayectoria del paso de magnificas bandas y para todos los gustos a lo largo de todo este tiempo.
Tres días oficiales de festival, pero una semana repleta de conciertos externos a este, acogiendo un sin fin de bandas, compaginadas con actividades, moda, gastronomía y cultura.
Podríamos decir que durante el festival la ciudad de Barcelona se transforma. Miles de asistentes se amontonaban haciendo cola para entrar al recinto. Un total de ocho escenarios repartían un cartel de lo más completo.
JUEVES 28
Comenzamos entusiasmados con la llegada al recinto, en un principio el desconocimiento de la localización de los escenarios se convirtió en una tediosa labor para acceder a los directos. Largas caminatas y un fuerte calor, pero nada más llegar nos dispusimos a comenzar en el escenario más cercano. La banda Perro desde Murcia es una de las bandas de indie con referencias a The Wedding Present o Los Planetas. Un soplo de aire fresco, guitarreos y letras de lo más cañeras.
Nuestra próxima parada Camarones Orquesta Guitarrística. Los brasileños repletos de energía presentaba con potencia su nuevo trabajo Rytmus Alucinantis. Pero teníamos ganas de ver a Ocellot, con su EP homónimo, toques folk y pop psicodélico, demostraron un fascinante directo en su tierra.
A lo lejos aunque ya empezado el concierto, los británicos Childhood debutaban en uno de los escenarios más grandes del festival, este cuarteto se abrió camino con su primer trabajo L”. Una pena disfrutar de ellos desde la lejanía. Una de las propuestas de este año que dejó impactado a los asistentes fue Kelela con una puesta en escena de lo más sensual y novedosa.
Y llegó uno de los momentos más esperados de este día con The Black Keys, este dúo puede presumir de una exitosa carrera. Bajo un manto de público incandescente y unas luces espectaculares, dieron todo de si en un excelente directo.
Pero no todo lo bueno acababa en el primer día oficial del festival. Pudimos bailar al son de Simian Mobile Disco, y fascinarnos con James Blake que dejó latiendo de amor a nuestros corazones además de un profundo espectáculo de sintetizadores y piano.
No obstante una de las propuestas más bailables de la noche fue Jungle, que no dejó a nadie indiferente.
VIERNES 29
Absortos de un primer día repleto de conciertos y stress por no querer perderse ninguno de los conciertos, aunque técnicamente imposible verlos todos nos quedamos satisfechos. Pero un segundo día con los ánimos un poco bajos y un desgaste físico evidente de festival, nuestras pilas se vieron recargadas a la llegada de nuevo al Primavera.
Nada más y nada menos empezábamos con el gran Julian Casablancas + The Voidz que nos sorprendía con un look estrepitoso y con una puesta en escena un tanto desganada, aunque correctos musicalmente, preferimos darle una segunda oportunidad al día siguiente con The Strokes.
Directos a por The New Pornographers, que después de sus carreras en solitario, presentaban su primer trabajo en cuatro años Bill Bruisers. Decidimos darnos un salto a por White Hills, destacados por sus guitarreos eléctricos y psicodélia.
Pero una de las bandas cabezas de cartel del día fueron Belle & Sebastian, los escoceses respetados por su trayectoria de más de una década, han abierto nuevos caminos hacia un trabajo mucho más maduro, dejando atrás ese estilo de pop jovial.
Una de las propuestas del día más alternativa fue Ariel Pink, su extravagante directo y su estilo ochentero, entretuvieron de lo lindo. Rápidamente corrimos hacia el escenario donde nos esperaba Death From Above 1979, no pudimos resistirnos faltar a su presentación, el dúo bajo y batería, demuestran fervientemente un punk de lo más potente e impactante.
La parte más movida del día o más bien de la noche fue de la mano de Alt-J, Jon Hopkins y Ratatat, aunque el punto y final con The Soft Moon dio mucho que hablar a los asistentes, que dejaron el recinto con buen sabor de boca para los amantes del post-punk, tonalidades oscuras y devastadoras.
SÁBADO 30
Qué mejor que empezar el último día de festival con The Ghost of a Saber Tooth Tiger, los amantes de Lennon y los Beatles, podían ver en Sean Lennon el reflejo de su padre. Además de influencias entre los sesenta y los setenta desde una perspectiva contemporánea, hicieron un directo verdaderamente de disfrute.
Directos a por American Football que se reúnen después de catorce años después de su disolución, el trío vuelve cargado de intensidad con su homónimo en el Primavera Sound. Pero después de la espera, uno de los grupos a los que apetecía ver era a Mac DeMarco, su desenfadado y simpático directo demostraron el porqué son una verdadera revelación en el indie actual.
Aunque de todas las bandas, la puesta en escena más espectacular y la cual no dejó indiferente a todos los que los vieron fue Foxygen, pudimos ver como las influencias de la unión de algunos de los miembros de Of Montreal, Bleached y The Flaming Lips era notoria en sus canciones, consiguiendo así uno de los mejores directos del festival, potente e inmejorable.
Llegaba el momento de los grandes del festival, Interpol, uno de los más esperados de la noche La banda de rock y post-punk, que regresaban con su nuevo trabajo El Pintor, también dio cabida a sus grandes éxitos que tanto anelhabamos ver en directo.
Y justo terminar con uno de los grandes nos fuimos a uno de los primeros confirmados en el cartel del festival, nada más y nada menos que The Strokes. Aún habiendo visto a Julian Casablancas, el quinteto demostró el porqué es una de las bandas referentes en el panorama musical alternativo.
Aunque los cabezas de cartel ya habían tocado, aunque quedaba festival para largo, y no pudimos resistirnos a uno de los habituales, Shellac que también estaban de celebración con motivo del vigésimo aniversario de su debut At Action Park, y eso hicieron, celebrarlo por todo lo alto.
Otra de las propuestas más sorprendentes de la noche fue la banda HEALTH, pura potencia en directo que podía despeinar a los asistentes con su sonido electrónico, industrial y uno de los referentes de la nueva generación ruidista. Quedaba muy poco para acabar pero no podíamos faltar a bandas como Caribou y su electrónica hipnótica o Der Panther con su flamante atrezzo en el escenario.
Y como colofón final del festival, otro de los habituales en el cierre del Primavera Sound, Dj Coco, que finalizaba con fuegos artificiales uno de los mejores festivales de fama mundial y atrayente de los amantes de la música de todos los rincones del mundo.
¡Larga vida al Primavera Sound! ¡Y hasta el año que viene!.