Por María Arroyo
Fotos Dayán Álvarez
Las ganas contenidas de nostalgia se vaciaron entre cantos, gritos, aplausos y brincos en un concierto que agotó las entradas, Pastilla cumple 20 años y aquellos que los han seguido desde entonces no se perdieron un concierto que marcaba no solo una segunda década de vida, sino un regreso a los escenarios de esta banda originaria de Los Ángeles, California.
Víctor “Chicles” Monroy estuvo acompañado de una nueva alineación de músicos que hicieron justicia a los antiguos integrantes y por dos horas entregaron lo mejor de su reportorio, desde Pastilla (2006) hasta Sentidos Saturados (2014), pasando, obviamente, por Vox Electra (1998), el disco que algunos fans califican como “el Dark Side of the Moon de Pastilla”, por ser el más representativo y porque les recuerda a una más temprana juventud, a la escuela, a los primeros desamores con canciones como “Solamente”, “Fórmula” o “Tatú”.
El de la noche del sábado 7 de mayo en el Lunario fue un concierto de felicidad entera para los fans. Pocas ocasiones se ve a un 100% del público atento a lo que sucede en el escenario, coreando las canciones, más ocupados en disfrutar cada tema que en grabar videos o llevarse alguna fotografía que después olvidarán.
Los éxitos desfilaron uno a uno como en rocola: “Cada Año”, “Colores”, “A Marte”, “Comezón”, “Ultraman”… No era necesario ni pedir que tocaran cierto tema, porque lo que sonara era bien recibido. El sudor entre el público por la noche cálida se avivaba con cada baile y estos, a la vez, formaban una fiesta de cumpleaños 20 que los Pastilla disfrutaron a la par.
Para terminar el festejo, cantaron dos covers que los hicieron tan suyos como cualquiera de sus éxitos. El primero fue «Bule Bule» (original de Los Teen Tops) y “Lágrimas” (incluido en el disco Un Tributo a (José José)”. La noche había terminado, estos músicos de California dejaron a todos empastillados y listos para seguir la fiesta en algún lugar de la ciudad.
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