Nadie podría acusar a The Deadly Affair de buscar una fórmula segura; esta banda chilena mezcla elementos de ambient, post-rock, noise y electrónica experimental, para crear un lenguaje sonoro propio. Cada canción es una estructura en constante evolución, donde los silencios son tan importantes como las explosiones de distorsión y ruido.
El proyecto está liderado por Santiago González Lihn, una figura cuya voz grave se manifiesta como un ancla emocional en medio del caos. Más que cantar, testifica, suplica y amenaza, llevando cada palabra al límite entre la revelación y la condena.
Lo acompaña Diego Lorca (ex-Föllakzoid), cuyas baterías cargadas de tensión y precisión suman una energía que se siente imparable. A su lado, el bajo de Louise Schmidt crea un contrapeso perfecto: profundo, constante y emocionalmente denso, sosteniendo incluso los momentos más disonantes del grupo.
Después de estrenar sus dos primeros sencillos Line in Heaven y I’m Looking Through Your Eyes, The Deadly Affair lanzó su álbum debut titulado: Visions Through the Sense of Silence, construyendo con este un universo sensorial completo. La producción cuida cada detalle, fundiendo distorsión, reverb y espacios de silencio en un todo orgánico que conmueve y descoloca a la vez.
Este es un proyecto que habita en los márgenes: entre lo íntimo y lo apocalíptico, entre lo hipnótico y lo abrasivo. Su música no es fácil, y eso es justamente parte de su encanto.
Con una propuesta sólida, una estética cuidada y un discurso sonoro coherente, The Deadly Affair se consolida como una de las bandas más prometedoras del circuito alternativo sudamericano.
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