Hay latitudes donde el post-punk tiene un nivel cultural muy importante y década tras década aparecen actos nuevos que siguen la tradición de sus antecesores para mantener vivo su legado.
Polonia quizá no es el lugar que piensen por default al momento de buscar música nueva en Internet, pero al igual que su selección de fútbol: ¡Tiene muchas sorpresas! Sí, los tonos gélidos que suelen dominar el clima de su región también tiene un impacto muy importante en los adolescentes que deciden formar una banda.
Como muestra de ello, les traemos un par de recomendaciones con bandas que se fundaron entre los ochenta y el dos miles, mientras el resto del mundo sucumbía ante Bauhaus, Siouxsie, Dead Can Dance y Xmal Deutschland.
1984
Quizá les resulte MUY complicado encontrar algo de 1984 en Internet, ya que al buscar referencias les van a salir bandas que sacaron un disco en aquel año. Sin embargo, al ser más específicos y buscarlos con uno de sus fundadores, Piotr “Mizerny” Liszcz, se van a topar con seis álbumes de estudio donde la banda aborda el post-punk y el death-rock en su forma más intensa, comenzando por su debut titulado, Why Not?
Wieże Fabryk
Wieże Fabryk nació con el cambio de milenio y aunque su sonido tiene rasgos muy marcados del post-punk, su tirada va más enfocada a los terrenos más rasposos y siniestros del punk polaco. Quizá las definiciones les suenen similares, pero la realidad es que hay una diferencia muy importante en su estilo.
Rezerwat
Si hay una banda que logró destacar en la década ochentera por pegarle más al synth-pop, esa es Rezerwat. Al inicio, con el álbum Serce, tenía una personalidad más apegada al coldwave, pero conforme sus integrantes fueron creciendo le dieron un notable switch a su pasado para tener una vida de treintañeros.
Pero ojo, siempre pueden clavarse en sus primeros lanzamientos para que sean testigos del potencial que tenían.
Mientras tanto… En Senegal, su contrincante de grupo del mundial: ¿hay post-punk o alguna vertiente goth? No, la respuesta es un rotundo no. Sin embargo, siempre pueden abrirle su corazón a uno de los artistas más prolíficos que ha dado el país: Baaba Maal.
¿Quién es? Pues verán, él es un compositor que a finales de los noventa se dio el lujo reclutar a Brian Eno como uno de los siete productores de su álbum, Nomad Soul, y desde entonces ha sido tomado en cuenta para proyectos de la BBC, tributos a Fela Kuti y hasta en el mundo de los videojuegos, al haber contribuido con la canción original de Far Cry 2.
Quizá en Senegal no hay post-punk, pero su tierra vio nacer a Baaba Maal y ha logrado hacer lo que muchos han intentado y no han logrado: tener a Brian Eno en su historial.
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