Skip to content

NOTICIA

Festival Nrmal 2014 en Monterrey

Nrmal Monterrey 2014 Rodrigo Jardón 3

Fotos RODRIGO JARDÓN & BÓGAR ADAME
Por WALLY BONANZA

Qué envidia saber que los regios han tenido cinco ediciones del Festival Nrmal donde los aleja de sus habituales playlists para transportarlos a nuevos rincones musicales. No sólo las primicias sonoras se llevan los aplausos también la cercanía de los escenarios, la “raza” alejada del hype (realmente les preocupaba la música y no terminar como bulto en el pasto), hasta los cambios de último momento son dignos de admiración. Nrmal demostró una vez más que Monterrey tiene una calidad sonora impresionante… o al menos así lo disfrutaron mis oídos.

La idea de probar y ver ruidos nuevos como Pumuky con oscuros riffs; El Triple Filtro moviendo caderas con exquisitas power pop ballads  y el ingenioso rap de Tino El Pingüino resultó toda una alucinación. Canté sin pena “El Príncipe del Rap” y un cover de Control Machete que La Banda Bastön interpretó. La memoria no me traicionó ni en «Me Gustas». Recuerdo plantarme en el escenario de Red Bull, ver a tres personas con las caras cubiertas y vestidas de negro cantar cumbias góticas. Me parece todavía una utopía y me llena de escalofrío la presentación de MiniTK del Miedo.

Otra muestra que me voló la cabeza fue el hardcore de Nazareno El Violento pues la garganta del frontman te raspaba el tímpano sin llegar a lastimarlo. El plus que Cabezas Podridas tiene en el escenario no va por su música sino por la niña con bucles apretados que baila con sus manos en forma de cuernos al ritmo del denso metal. Bebé metalera forever! No quiero dejar pasar la increíble muestra gastronómica que hubo. La carne de Monterrey es una ricura y había tantos foodtrucks de donde escoger que cada uno llenaba hasta el paladar vegano más exigente. Una hamburguesa y papas fritas de La Cacharra fueron suficientes.

Se notaba que las nubes nos iban a traicionar pero el ambiente tropical plantaba a la gente en No Zu. Un pantalón tornasol que decía en una pierna heat y en la otra el nombre de la banda, y los solos de trompeta con los que iniciaron fueron indicios de una bailable presentación. Las percusiones son interrumpidas drásticamente en el acto de los australianos pero justo cuando dudas si es el final… comienzan con otra bomba rítmica. Seguía Dënver. La voz de Mariana casi no se escuchaba. Varios muchachos que estaban atrás de mí pedían a gritos que el dúo los hiciera bailar y lo hicieron al cerrar con hits como “Los Adolescentes” y “Revista de Gimnasia”. Lástima por la lluvia que provocó cambios de última hora. A los de Extraperlo les valió y subieron a una multitud de regios, defeños y gringos al escenario Rojo. Al otro lado mucha gente se resguardaba en la carpa viendo a Matías Aguayo X MostroRetox y Los Macuanos lamentablemente cancelaron su presentación.

A pesar de ligeros fallos en la producción (no estaba el DJ original) y un retraso en el horario, Kelela inició con “Enemy” donde inundó los oídos con su aguda voz. Se notaba preocupada y constantemente agradecía el cariño que recibió de México. Soy quisquillosa en cuanto a los agradecimientos. Creo que dos son suficientes (incio y final) pero chutarte al final de cada canción un «I’m so happy to be here… Oh my God! It’s amazing… Wow! You know the lyrics! My God!» resultó incómodo. Eso sí, bastaron un par de pants grises y una ombliguera como outfit para interpretar su EP Cut 4 Me. Lo que hace grande a esta chica es el trip que provoca en tu piel al escuchar el alcance que tiene su voz. En medio esta presentación caché a un par de tipos bailando con enormes chamarras al lado del escenario. Era nada más y nada menos que DJ Rashad junto a DJ Spinn, quienes horas después se encargarían de cerrar el festival en el mismo escenario.

Creí que la lluvia no impediría ver a Poolside pero estuvo imposible. Sólo estaba Jeffrey Paradise en el escenario tratando de hacer un gran set pero hasta él tuvo problemas porque casi quemó el escenario. Tuve que correr del escenario Azul porque no me estaba calentando, de hecho siento que al calidad con la que trabaja este dúo se minimizó por lo que a Jeffrey le quedó grande el escenario. Preferí ver a Marco Guitiérrez (Siete Catorce) y comprobar qué tan alto estaba. Bueno, su estatura no es lo interesante. El hombre no paraba de bailar. Estaba concentrado en las tornas y pocas veces volteó al escenario, una de esas sólo lo hizo para encender un cigarro. Fue algo hipnótico ver cómo un compatriota menor que yo demolía la carpa. Después el estilo booth house que Rashar Harden pinchó y la brutal energía de Spinn fueron los highlights del todo el festival. Sin duda la mezcla fue un agasajo. Ejemplo claro fue en “I Don’t Give A Fuck” que representó cada movimiento del pecho a las caderas en las chicas para que en “Pass That Shit” los batos encendieran las pipas y dejaran fluir los beats en sus las piernas. Ni Siete Catorce pudo aguantarse bailar pegadito con su morra. Rashad estará en el Vive Latino. Por favor visiten el domingo a las 9:35pm el Gozadero Dancing. Son de esas presentaciones que deben estar en tu lista Once In A Life Time.

Bien dicen que la felicidad se encuentra fuera de tu zona de confort. Justo a ese lugar desconocido e increíble nos llevó Nrmal. Bajo su exquisita oferta musical abrimos nuestros horizontes a modernos ruidos que sin duda nos hace dichosos. En próximos años podrás notar el crecimiento de las bandas y sólo recordar el sitio, en medio de lodo, drogas y cervezas, donde los escuchaste por primera vez.

Festival Nrmal Will Prevail!

Noticias relacionadas

Volver arriba