Por Ernesto Olvera / @Ernestime
Canadá es un país cuya imagen puede transmitirnos paz, tranquilidad, amor, Arcade Fire y postales de caminos cubiertos por hojas de árboles en pleno Otoño. Esa imagen cliché puede hacerlos sonreír sin complicaciones, pero la otra cara de aquella región del mundo tiene un lado mucho más atractivo, perturbado y agresivo del que pudiera pensarse y claro, para animarnos a explorarlo tenemos bandas como METZ que vienen a barrer con todos los estigmas de su tierra natal para construir paredes de poder y derrumbarlas con un sólo acorde.
METZ es toda esa furia que se va acumulando durante los 365 días del año y que por alguna u otra razón, siempre se queda estancada en lo más profundo de nuestro ser. Para liberarla, basta con darle una escuchada a su álbum homónimo para sentir cómo poco a poco toda esa furia y las ganas de patearle el trasero a alguien van siendo desechadas al agitar de forma violenta la cabeza con «Wasted».
Alex Edkins, Hayden Menzies y Chris Slorach nunca se han andado con rodeos. Las monumentales guitarras y el poder con el que suena la batería proyecta un sonido que parece ser provocado por más de cinco personas. Esa es la magia de METZ, estos tres tipos tienen la capacidad de derretirte la cara con sólo un riff, pero lo mejor viene cuando las rasposas vocales se encargan de inyectarle una brutal dosis de energía a las canciones que por ley, los dejarán completamente extasiados y bañados en sudor durante sus presentaciones en vivo.
Tomando la esencia clásica del punk del que se alimentaba Pixies y el grunge más poderoso que se hacía en los 90 a raíz de la existencia de Mudhoney, este trío asombró por completo a Sub Pop Records y por ende los ficharon para lanzar su aclamado debut producido por Graham Walsh de Holy Fuck. Desde entonces se han ido haciendo de un séquito de seguidores bastante importante que, después de dejarse querer por «Wet Blanket», no les quedó de otra más que adoptar por completo cada uno de los tracks del álbum, el cual además cabe mencionar que estuvo nominado al Polaris Music Prize de 2013 sólo que… bueno, el premio se lo entregaron a Godspeed You! Black Emperor.
La experiencia de verlos en vivo les volará la cabeza y si se dejan llevar por su fuerza, estamos completamente seguros de que perderán una buena cantidad de calorías, cosa que también hace de METZ algo bastante bueno para la salud. Afortunadamente no tendrán que vivir con la duda sobre cuándo demonios podrán tener la oportunidad de ir a uno de sus shows, ya que la banda vendrá a patear traseros a la Ciudad de México como parte del Festival NRMAL, el cual tendrá lugar los próximos 28 de febrero y 1 de marzo en el Deportivo Lomas Altas.
¿Quieren tener una imagen más amplia de lo que verán? Sólo chéquense este extracto de su presentación en el Pitchfork Festival en Chicago, en el cual podrán escuchar la canción exclusiva que grabaron para Adult Swim titulada «Can’t Understand». Prepárense porque no habrá piedad: