«No vendieron muchos discos, pero quienes los escucharon formaron una banda»
Esa es la sentencia con la que apareció en 2014 un documental llamado Beautiful Noise, donde podemos tener acceso al origen del denominado shoegaze de la mano de sus protagonistas y de las personas que vieron cómo se fue desarrollando dicho fenómeno con la llegada de los 90, tal es el caso de Robert Smith, Trent Reznor y Billy Corgan.
Dentro de todo lo que se puede apreciar en él, ese quote se puede seguir aplicando en la actualidad con las bandas que toman como punto de partida el Loveless o Souvlaki para hacer su propia reinterpretación del género para construir paredes de ruido que en lugar de sentirse como golpes en la cabeza, sirven como un oleaje musical que estimula las emociones de todo aquel que simplemente se deja llevar por lo que puede provocar una simple melodía al chocar con sus oídos.

Aunque con el Internet existe una mayor apertura y discos como los que acabamos de mencionar han llegado a personas que en el pasado no los habían podido tener en sus manos, el shoegaze sigue siendo una rama de nicho que dentro de su propia estructura ha construido una comunidad que no se toma tan a ligera las promesas de Kevin Shields (incluso hay un sin fin de páginas de shitposting), por lo que siempre es bueno echar un vistazo a la manera en la que ha ido mutando el género con el paso de los años y la manera en la que sus clásicos están perdurando en el tiempo.
Por esa simple y sencilla razón, seleccionamos 25 discos que resumen a la perfección su origen, la consolidación y lo que está por venir dentro del shoegaze, ya que al final más que ser un género musical, es una emoción que brota directamente del corazón.






