Por Milton Barboza Arriaga, Director Editorial FILTER México
Creo que varios en el mundo fuimos tocados por Nirvana y su música cuando éramos pequeños; claro, hace más de 20 años es toda una vida.
Mi caso fue como el de muchos: cuando iba en la secundaria y en mi afán por conocer música nueva y “alternativa”, llegó a mis manos el cassette en donde aquel niño nadando en una piscina me presentaba el Nevermind, material clave para comprender muchas cosas de la escena de inicios de los noventa. “Smells Like Teen Spirit” fue el enlace directo con Nirvana y toda una época en que junto con mis amigos de la escuela nos encantaba armar el slam en las fiestas/tardeadas de los viernes, donde indudablemente fumábamos y tomábamos… ya nos sentíamos “punks”, “grungeros”. Soñábamos con tener esa mata desaliñada, tocar la guitarra hasta destrozarla, pegarle a la batería como si fuera el peor de tus enemigos… cada una de las canciones del Nevermind eran un prodigioso sueño adolescente que movía mi mente.
Tiempo después adquirí el Bleach en un viaje a Mexicali, el cassette original gringo y lo mejor, lo primero que había hecho la banda que todavía sonaba más atascado, más descompuesto, lo que tanto me gustaba de la música… sin dudas Nirvana fue parte fundamental de mi vida junto con otras bandas como los Ramones o Pixies.
Estoy hablando de 1991 y 1992, más o menos, ya para el 94, cuando nos enteramos de la muerte de Kurt Cobain y sin que existiera ni Internet en casa y mucho menos redes sociales, mis amigos y yo quedamos un tanto impactados por la noticia… se había ido uno de nuestros héroes más recientes, y con él un poco de la historia de la música quedaba inscrito con letras doradas.
Todas esas historias en torno a su muerte hoy me siguen fascinando, como la que habla que en aquel fatídico martes 5 de abril de 1994, se encontraban Courtney Love (esposa de Cobain) y Evan Dando (vocalista y líder de The Lemonheads) tomando con Kurt y fueron quienes lo incitaron a suicidarse, porque tenían una relación amorosa.
Hoy a la distancia todo ha quedado en el recuerdo y el juego de preguntarnos: ¿qué habría pasado si Kurt Cobain siguiera vivo en este 2014? Siempre es interesante…
Yo pensaría que, obviamente estaría divorciado de Courtney Love; Dave Grohl tendría a los Foo Fighters con todo y algunas broncas que se hubiera aventado con Cobain, Nirvana habría realizado unos cinco discos más; Kurt seguro hubiera entrado en una pelea a distancia con personajes como Bono de U2, Kanye West y hasta Julian Casablancas de The Strokes. No dudaría que Nirvana habría venido a México unas tres veces.
Pero como el hubiera no existe y estamos conmemorando los 20 años de muerto de Kurt Cobain, en FILTER México quisimos rendirle un homenaje como mejor se merece, gente de la industria hablando de él, de la influencia en sus vidas y de muchas otras cosas más.
Esperamos esto sirva como un documento que les dé armas a los más jóvenes para saber cómo se vivían aquellos viejos noventa y cuál fue la importancia de Cobain, Nirvana y el grunge como movimiento no sólo musical sino de vida.
Bienvenidos…
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