En el escenario de una pandemia global nuestra forma de enlazarnos con otras personas cambió drásticamente, aprendimos a hacer conexiones fuertes a la distancia y a trabajar de diferentes formas. Un gran ejemplo de esto es Quetzalkrautl, un dúo México-Alemán que nació con kilómetros de distancia de por medio pero unidos por la pasión hacia la electrónica.
Ramón Amezcua (México) y Harald Grosskopf (Alemania) colaboraron para hacer Quetzalkrautl posible. Todo inició entre un grupo de Facebook y un par de conversaciones hasta germinar en 6 tracks que mezclan la clásica experimentación alemana con la vanguardia de la electrónica mexicana.
“Ligeti es una de mis canciones favoritas, es un rollo más ambient pero también hay muchos elementos del krautrock” – Ramón Amezcua (Bostich)
En entrevista para FILTER, Ramón Amezcua (Bostich) nos habló de cómo se formó este proyecto:
“Yo lo agregué (a Harald) de un grupo de sintetizadores en Facebook, no lo quería stalkear ni decirle que yo era su fan. Un día me puso un comentario sobre música y le comenté que estaba haciendo un álbum y que si quería colaborar. No esperaba que aceptara porque es parte de los que iniciaron el movimiento krautrock, fue músico de proyectos muy importantes como Ash Ra Temple y Klaus Schulze.
Me dijo que sí y le mandé un par de canciones y me las regresó hasta con arreglos y videos de él mismo tocandolas. Yo creo que también se puso a investigar qué andaba haciendo yo en México con Nortec y el movimiento de aquí le llamó la atención.”
En este material Ramón retoma el sonido de los ochenta, juega con cajas de ritmo y un sintetizador TB-303 que se entremezcla con las raíces del krautrock para lograr un disco que se inclina más a lo ambiental.
“Quisimos hacer algo con nuestras raíces; el es parte germinal del krautrock y yo me enfoque más a mis raíces de música electrónica, los inicios del techno, ambient, acid lo que yo escuchaba cuando era chico, rock progresivo y ese rollo. Nos mandamos maquetas y así se dio este proyecto.”
Rompiendo fronteras territoriales y generacionales es que Quetzalkrautl logra encontrar un sonido único en su estilo. Aunque para el género sea muy “old school” lanzar un álbum completo en este se va desarrollando la historia de cómo la música alemana llegó a México.
“Este disco es un reflejo de cómo esta música llegó a México, a través de discos de Kraftwerk e influyó en toda una generación fuera de Alemania. Quetzalkrautl es toda una historia de alguien que comenzó a hacer música en los sesenta, lo escuchamos en los ochenta y estamos en el 2021 y siguen generando distintas emociones”
