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COBERTURA

Reseña: 'Aureate Gloom' de Of Montreal

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Auretate Gloom
Of Montreal
Polyvinyl
74%

Por: José Carlos Martínez

Hablar de Aureate Gloom, el nuevo material de Of Montreal, es hablar de la fuerza creativa con la que Kevin Barnes y todos los demás integrantes han tratado de describir de acuerdo a su estado de ánimo, este álbum es un nuevo nacimiento de la banda. La separación entre Kevin y su esposa después de una relación de once años se nota en esta producción con el tono melancólico que lo envuelve.

Con casi dos décadas en la industria, es casi imposible encontrar alguna otra banda que suene a lo que suena Of Montreal; rock psicodélico, pop y esas increíbles presentaciones en vivo los hacen únicos. Para este décimo tercer álbum, los estadounidenses siguen demostrando su poder al crear música, a pesar de que Kevin es el único integrante constante desde sus inicios, no han perdido coherencia en su sonido tras los largos años de carrera musical.

En Aureate Gloom lograron moldear algo que brilla, se eleva y gira constantemente, su esencia; por ejemplo, en “Aluminium Crown”, la perdida y el dolor son los puntos clave del track, entre un tono somnoliento va mostrando su simpatía y sacude todas esas telarañas que parecían acorralarlos.

Con grandiosos arreglos musicales y extensas letras, el disco avanza lentamente. Inspirado en el punk, el álbum va adquiriendo más y más energía pese a que suena demasiado personal por el lado de Barnes. Y aunque puede que sea así, qué más da, si nos regala trabajos tan increíbles. “Last Rites at The Jane Hotel” parece describir a un matrimonio con un soundtrack popero que enamora a cualquiera.

Este material es una experiencia de rock psicodélico que demuestra que Of Montreal está logrando sacar su sonido de la música convencional, o simplemente están creando su propio género. Auretate Gloom fue grabado directamente en cinta, lo que lo hace más cálido y le da un toque distintivo en vivo. Cada una de las pistas parece un viaje a través de la diversidad de géneros y épocas que no conocíamos, pero no deja de ser coherente. “Apollyon Of Blue Room”, pasa de una distorsión sesentera a un pop barroco que vuelve loco a cualquiera.

No puedo decir que el álbum es el punto de partida de la discografía de Of Montreal, pero si supera a muchos de sus anteriores discos que fueron verdaderamente mediocres. Podría definirlo como un esfuerzo sólido que intenta dar una pauta importante dentro de los nuevos experimentos de los estadounidenses. Cada canción tiene su toque preciso, y para una banda que lleva casi una década en activo esto se podría considerar como un logro.

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